Nuestros miembros: Lucy Cisneros
Lucy Cisneros jugó al tenis en su primer año en el Colegio de Bakersfield y se enamoró del deporte.
Pero desde que comenzó a trabajar en Petaluma Valley Hospital hace dos años, la técnica de ultrasonido no ha tenido la oportunidad de levantar una raqueta. “Mi horario de trabajo es demasiado ocupado”, explicó.
El problema es la escasez de personal en su departamento que la obliga a trabajar los fines de semana y turnos adicionales.
Para empeorar las cosas, la administración a menudo ignoraba las protecciones del contrato sindical que protegen a los empleados de tener que trabajar fines de semana consecutivos.
En vez de aceptar el statu quo, Lucy se convirtió en delegada sindical para ayudar a proteger sus derechos y defender a sus colegas.
“No quiero ver al hospital tratando de aprovecharse de los empleados”, dijo. “El hecho es que toman estas grandes decisiones y no tienen en cuenta cómo nos afecta. El hospital debería querer que tengamos un balance más saludable entre el trabajo y nuestra vida personal”.
Lucy había estado trabajando fines de semana consecutivos porque el hospital no ha reemplazado a un empleado de tiempo completo que ha estado con permiso desde marzo.
Pero, ella está decidida a corregir esto. A principios de diciembre, Lucy envió un correo electrónico a su supervisor solicitando tener libre el fin de semana de Navidad y citando el artículo y la página del contrato que especifican las cláusulas sobre el tiempo libre.
Su solicitud fue rechazada. El hospital y el departamento de Recursos Humanos argumentó que Lucy puede trabajar cada fin de semana, pues es una trabajadora “diversa” que labora en un hospital que está abierto los fines de semana.
Lucy presentó una queja y se reunió con el departamento de Recursos Humanos para pedir nuevamente descansar un mínimo de cada otro fin de semana, y esta vez su pedido tuvo éxito, reportó felizmente.
Esa victoria sirve para recordarle a sus colegas que al tener un sindicato y un acuerdo colectivo que los respalda, no deben temer a hacer valer sus derechos.
“Yo, si veo algo mal, levanto la voz”, dijo Lucy.